Tenemos 2 tipos de cabello internacional, ambos de excelente calidad premium pero con características diferentes.
El cabello europeo se distingue por su textura fina y sedosa, con un grosor delgado que lo hace perfecto para looks naturales y elegantes. Es fácil de peinar, mantener y estilizar, ya que responde muy bien a herramientas de calor y tintes suaves. Su ligereza aporta un movimiento fluido y un acabado discreto, ideal para mujeres que buscan sofisticación y un resultado impecable en extensiones invisibles.
El cabello brasileño es reconocido mundialmente por su grosor intermedio a grueso, su alta densidad y su capacidad de mantener el volumen con facilidad. Es resistente, duradero y versátil: se adapta a estilos lisos, ondulados o rizados sin perder fuerza ni cuerpo. Su textura ligeramente más pesada permite un look con mayor impacto visual, perfecto para quienes desean una melena abundante y con carácter.
El cabello nacional ofrece textura intermedia y resistencia natural, lo que lo convierte en una opción equilibrada y accesible. Su grosor medio lo hace adaptable a distintas técnicas y longitudes, integrándose de manera armónica con el cabello propio. Es ideal para quienes buscan un cambio notorio pero conservando un estilo auténtico y práctico, con resultados duraderos y naturales.